Tenemos que crear una sociedad donde esté mal visto la osentación por la ostentación y su publicidad en los medios de comunicación. No se trata de prohibir sino de educar para que la libertad que da el conocimiento, el saber del sufrimiento ajeno y de la posibilidad del cambio obre como fuerza interior para generar la ayuda. Y ese cambio en la concepción del capitalismo debe ser fomentado desde todos los estamentos públicos.
A su vez uno de los caminos por los que debe evolucionar el arte del siglo XXI viene por un arte social que fomente la concienciación ciudadana y que ayude a ser artistas a aquellos que jamás habrían podido serlo vivendo en la miseria. Un arte con mayúsculas que se extienda a toda la sociedad mundial y no solo a la élite cultural del mundo occidental. Un arte más universal que nunca que sirva como como lazo de unión entre los pueblo de un mundo globalizado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario